Corría 2004, yo era una wiccana que prácticamente empezaba su camino, y casi todas las webs que me encontraba eran prácticamente iguales. Casi todas incluían estos temas: la Rede, los Dioses, las festividades y las herramientas. Poco más, y ni rastro de ejercicios espirituales, ni de cómo llevar una vida normal con el hecho de proclamarse a uno mismo «brujo». No había temas de actualidad, la política era para los débiles (porque entonces no estábamos en crisis, claro) y quizá lo más cercano a un tema de candente actualidad fueran las eventuales alertas ecológicas, alentadas en España sobre todo por el desastre del Prestige que había acontecido poco tiempo antes.
En medio de todo eso nació la revista online 13 lunas, en Yule de 2004. Le puse 13 lunas porque se supone que son las que se suceden en un año. Yo era muy inexperta y una cría por aquel entonces (ahora tengo más experiencia pero sigo siendo igual de cría), pero lo hice con toda la ilusión del mundo. Su símbolo fue una triple luna, y sus colores, blanco, plateado y azul. Conté con gente estupenda que aportaron sus puntos de vista y sus artículos rigurosos, con temas «diferentes»: no más Rede, no más «El Dios y la Diosa», no más «los sabbats son ocho». Durante dos años 13 lunas fue editada con amor, hasta que en 2006 y por motivos personales tuve que dejarla de lado. Los colaboradores también escaseaban y cada vez me era más difícil escribir, sobre todo por motivos personales que mucha gente hoy conoce: estaba ejerciendo mi particular lucha contra la depresión.
En 2008 cancelé definitivamente el dominio de 13 lunas, pero me quedé con esa espinita clavada. Tiempo después y producto de un cambio de aires, pues me vine a vivir a Granada, decidí rehacerla pero en formato blog. Y se convirtió, hace 3 años, en el 13 lunas que estás leyendo ahora tú, desde el otro lado de esta pantalla.
He escrito muchas cosas en estas líneas, que han sido testigos de mi cambio como persona y como sacerdotisa. Mucha gente ha seguido este blog de cerca y de lejos, y para mí es un honor haber llegado a tanta gente. También ha escrito aquí una buena amiga de vez en cuando, como un guiño a la antigua 13 lunas y a sus colaboradores, cuyo espíritu no desaparece del todo. Curiosamente y gracias a esta web he llegado a ver expresiones mías, que he escrito por aquí, reflejadas en foros, que luego eran reflejadas en vídeos de Youtube y luego me han llegado por otro lado. Es impresionante lo contagiosas que son las ideas y cómo vuelan en esta comunidad. Durante mucho tiempo me asustó el hecho de que lo que yo pudiera decir estuviera errado y que eso llegara a calar tan fuertemente en la comunidad que al final se hiciera propio, todo por un artículo mal escrito o mal expresado. No os voy a mentir: he errado muchísimo a ese respecto, pero no puedo dejar de escribir. Luego la gente se sorprende cuando digo que no estoy de acuerdo conmigo misma, y contesto con una sonrisa y con una frase: «yo lo llamo evolución«.
Así pues, esta abuelita Cebolleta nostálgica y algo carca quiere daros las gracias por haber sido testigos, igual que estas líneas, igual que este humilde WordPress, de desvaríos y evoluciones. 13 lunas lo hacéis vosotros porque leéis y porque os contagiáis. 13 lunas se ha nutrido durante 3 años (y muchos más) de vuestros comentarios e emails. 13 lunas no existiría si unas mentes dispuestas a escuchar no estuvieran atentos a este rss y a este blog. 13 lunas siempre seréis vosotros. Así que feliz cumpleaños a todos.
Cada vez me sorprende más ver como de similares y diferentes son los senderos que se recorren :). De verdad muchisimas gracias por compartir con todo aquel que quiera escuchar tu experiencia y visión del camino. Al descubrir tu bog he podido aprender muchas cosas y siempre ha resultado interesante leerlo, pero si me permites tengo que reconocer que en tus últimas entradas estoy disfrutando aún más. Mucha suerte en tu caminar y evolución y otra vez gracias por compartir tus experiencias, al menos a mi me han ayudado en el mío. Al hablar y felicitar es fácil caer en cederle a la persona elogiada la responsabilidad de las decisiones que tomamos y esta a tomarse dicha responsabilidad. Sin embargo, es responsabilidad de cada uno de nosotros discernir entre cuanto leemos, vemos y experimentamos. Además cuando lo explicamos solamente hacemos una imagen que nos puede ayudar a entenderlo o a organizar la información, cosa que puede ayudar a los demás sin olvidar que simplemente «es poner vallas en el campo» ;). Muchas felicidades por tu caminar, cuya puntita como la del iceberg podemos ver aquí :).
muchos al principio nos sentimos así y por blogs como el tuyo personas como yo que estamos iniciando este bello sendero aprendemos lo que verdaderamente y de corazón significa este camino gracias a ti de parte de muchos
Gracias por compartir! ♡ estoy en el reencuentro de lo que alguna vez fui