Con frecuencia, se utilizan los términos iniciación y dedicación como sinónimos, si bien no son exactamente lo mismo. En este artículo se procederá a explicar la diferencia que existe entre ambas palabras, así como las principales fuentes de conflicto que surgen entre diferentes ramas de la Wicca a raíz de la utilización de estos términos.
La dedicación
Entendemos la dedicación, como indica su propio nombre, como el ritual mediante el cual el practicante se compromete a establecer una relación con una deidad o conjunto de deidades, o su aceptación de la Wicca como su religión.
La dedicación se puede hacer a solas o con más personas, y constituye una especie de «contrato», sobre todo cuando se acuerda con una deidad. Normalmente se le pone fecha a dicho contrato, y cuando se está muy seguro de que es el camino que se debe seguir, sólo entonces, se hace de por vida. Cuando la dedicación se realiza para convertirse en devoto de una deidad, normalmente se establecen un número de devociones o prácticas mínimas que se han de realizar para culminar esa relación entre devoto y deidad.
La dedicación la puede hacer uno mismo teniendo a los dioses presentes, y es lo que se denomina auto-dedicación. Es la práctica más empleada por los wiccanos solitarios.
La iniciación
Esta práctica es la que se realiza siempre un maestro hacia su discípulo, y constituye el elemento esotérico presente en la Wicca.
La iniciación siempre la realiza un maestro del más alto grado de la tradición que sea, esto es, un sumo sacerdote o suma sacerdotisa, e implica la adquisición de un linaje dado por parte del discípulo. Es decir, el nuevo iniciado es el «hijo» espiritual de la persona que le ha iniciado.
En algunos contextos, normalmente iniciaciones a distancia, se contempla la auto-iniciación pero siempre con el consentimiento y el poder dado (en Wicca Correlliana se denomina «Imperio») por el sumo sacerdote o suma sacerdotisa para realizarlo. El maestro realiza una serie de operaciones a nivel del Astral para darle al nuevo iniciado la posibilidad de iniciarse únicamente a sí mismo y con un determinado grado. Sin embargo, siempre es preferible contar en persona con un mentor o guía para la iniciación, sobre todo por dos motivos:
– Se trata de un rito de paso que es mejor realizar con alguien que valide físicamente que se está realizando.
– Se busca una experiencia extática o de trance, en la que puede ser necesaria la ayuda o guía de una persona experta. A veces, se utiliza suspensión de los sentidos o prácticas similares, que resultan imposibles de realizar solo.
La iniciación normalmente garantiza una serie de conocimientos mínimos, ya que para llegar a ese momento se ha tenido que pasar por un entrenamiento sin el cual es improbable que el maestro otorgue la iniciación necesaria.
Polémica entre ambos términos
La principal polémica y confusión entre ambos términos viene porque muchos se preguntan cómo se inició el primer wiccano de la Historia. Si consideramos que los wiccanos solitarios sólo pueden dedicarse, se obtiene como respuesta que el primer wiccano no pudo iniciarse. Obviamente, el primer wiccano no pudo ser iniciado, pero pudo aprender técnicas iniciatorias de otras tradiciones o movimientos, o haberse iniciado en círculos de brujería tradicional. Tomando al primer wiccano como Gardner, podemos decir que tuvo al menos una maestra (la vieja Dorothy) que lo inició en el Arte.
Se puede inferir, no obstante, que el primer wiccano de la Historia posiblemente fuera un dedicado, pero que su experiencia y rango dentro de un círculo le otorgaran un status de sumo sacerdote. Pero para la obtención de dicho grado, tuvo que ser realmente una persona de gran peso dentro de su comunidad, ya que de poco sirve lo que uno se considere si el resto de la comunidad no reconoce el grado.
Por otro lado, y remontándonos a otras tradiciones de las cuales la Wicca ha sido heredera, existen en la Historia multitud de asociaciones y círculos esotéricos que se basaban en la estructura de linaje para obtener iniciación. La Wicca sólo copia este esquema, y lo hereda de dichas tradiciones. Es probable, por tanto, que ese primer wiccano también estuviera iniciado en alguna tradición esotérica de este tipo, que le introdujera en la estructura de linaje.
Sin embargo, hay algo negativo en todo esto. Hay grupos que contemplan a los solitarios como «no-wiccanos», ya que muchos de éstos se auto-inician sin linaje ni maestro más que ellos mismos y su propia experiencia, y sin adscripción a ninguna tradición esotérica afín. La actitud hacia estos solitarios varía de tradición en tradición, aunque es más correcto decir que estos wiccanos se han auto-dedicado, ya que la iniciación conlleva la existencia de un maestro.
La dedicación, entendida como la firme promesa de pertenecer a una Fe, debe ser por sí misma garantía de la pertenencia a la Wicca, y los solitarios no tienen por qué ser menospreciados por no haber sido iniciados. Al contrario, pues el camino solitario tiene mucho mérito por su aridez y dedicación.
Los solitarios no necesitan decir que se han auto-iniciado para tener más validez delante de wiccanos con linaje, al contrario, el uso correcto de los términos les da credibilidad y es una muestra de respeto hacia el que elige el camino guiado. Por tanto, tenemos una diferencia clara: el solitario se dedica, y el wiccano de tradición es iniciado. La utilización de los términos es clave para el respeto mutuo, pues cada uno tiene su lugar y es igualmente importante.
Me encanta 🙂 la verdad es que siempre he creido que el conflicto entre «dedicación» e «iniciación» se debe a un error de traducción muy extendido. Además autoiniciación es una palabra que no existe, por lógica… un «iniciado» es:
1. adj. Dicho de una persona: Que comparte el conocimiento de algo reservado a un grupo limitado.
2. m. Miembro de una sociedad secreta.
es decir, que si no hay Coven o grupo, no puede haber iniciación… es obvio.
Los antropólogos han argumentado que los ritos de iniciación existen porque ellos promueven la cohesión social. Social e históricamente, sólo se inician como tal aquellas personas que pertenecen a un círculo determinado, los guerreros nativos américanos, los sacerdotes de todas las religiones, las mujeres que llevan ese mismo papel, los que entran en una sociedad secreta…
Lo mío es bastante curioso y seguro que muchos lo comparten: como solitario, hice mi ritual de (auto-iniciación/dedicación…como queráis, no me pelearé por eso jajaja). Sin embargo, la auténtica iniciación ha sido mi propio camino, al andarlo, cada paso ha sido una iniciación, cada vez he ido pasando etapas o fasas que han conferido mayor sabiduría, poder, responsabilidad. La verdadera iniciación te viene de la vida y de los guías, los dioses te la producen…para mi no es válida la iniciación de un maestro o gurú o de un coven, salvo por el hecho de formar parte del grupo o como representación simbólica de la verdadera iniciación que se está produciendo en la persona…y desde luego, la iniciación por grados me parece algo muy raro, más en el paganismo.
Pero claro, ya he dicho que es mi visión particular, que es rara y que lo más seguro es que muchos no estéis de acuerdo, aunque muchos otros seguro la compartiréis. Pero me ha parecido enriquecedor exponerla por si a alguien le va bien.
Mis bendiciones )0(
Estoy de acuerdo con Circe, pues yo me auto-dedique en noviembre y de momento quiero seguir mi camino en solitario, más que nada poruqe tengo la necesidad de hacerlo todo yo misma y de aprender con la vida, el hecho de que alguien mas me enseño no estaria mal pero, lo de pertenecer un grupo y saber que alli no todos son iguales en rango no se , por mucho que se diga q se comportan igual unos con otros no me da mucha confianza.
Sí vale pero yo creo que aquí se está hablando de dos palabras que quieren separar dos aspectos importantes, aunque se diga que la dedicación se puede hacer en grupo también, me gusta pensar que al hablar de dedicación se está refiriendo al acto en solitario y la iniciación a la que se hace en grupo.
Utilizar la palabra iniciación como comienzo de algo, es otro tema y merece la pena distinguirlo de alguna forma. No os parece?