Creando un altar: nociones básicas

Uno de los mayores retos a los que se enfrenta alguien que acaba de empezar en la Wicca suele ser el altar. No digo que para los veteranos no sea todo un reto decorarlo adecuadamente a su momento vital y a la estación, buscar nuevos significados a los elementos que lo componen o realizar trabajos manuales para darle un toque más personal a su altar, sino que cuando uno empieza suele estar tan perdido que lo deseable sería tener un manual en el que nos contaran lo básico sobre la creación de altares. Es, por tanto, más necesario para los principiantes que para los veteranos en la materia.

Para la información que aquí presento me valgo de mi instrucción como Correlliana. Aclararé en aquellos aspectos que puedan presentar discrepancias por qué lo hago así, y también las diferencias con lo que se hace en otras tradiciones.

Solemos necesitar un altar para nuestro trabajo personal, ya sea para la comunicación con nuestros espíritus guías, Dioses o nuestro Yo Superior, para nuestras meditaciones o devociones, y también para los rituales, claro está.

¿Dónde poner el altar?

En principio, cualquier habitación en la que vayas a estar tranquilo para que te permita dedicarte a tus devociones diarias y con espacio libre es un buen lugar para poner un altar. Ahora bien, hay cosas que necesitarás si lo que quieres es tener un altar permanente, que no tengas que ir cambiando de ubicación cada cierto tiempo, y eso es, principalmente, una pared libre. Por otro lado, menciono una habitación y no un altar al aire libre (que también se puede tener) porque estando a la intemperie dependemos de la meteorología para practicar. Salvo que las condiciones climatológicas de nuestra zona sean especialmente estables, creo que lo más sensato es establecer un altar bajo techo.

Seamos prácticos: Sé que Buckland en su «Wicca: Prácticas y principios de la brujería» dice que lo ideal es tener una habitación sólo para el altar, pero el espacio escasea y si se tiene esta posibilidad realmente se tiene mucha suerte. Además, el mismo autor dice, en este mismo libro, que lo ideal sería tener el altar en medio de la habitación, pero vuelvo a insistir en lo mismo. Lo más cabal ahora mismo y con la vida que tenemos hoy día es poner el altar pegado a una pared.

Lo primero que vamos a necesitar para establecer nuestro altar es saber dónde ponerlo. Aquí hay diferencias entre unas tradiciones y otras, a mí me han enseñado que pared del Norte es la idónea por ser la que se encuentra ligada a la sabiduría del elemento Tierra. Otras tradiciones (incluyendo al mismo Buckland en esta obra) ponen la orientación del altar hacia el Este. Depende, por tanto, de la tradición a la que se encuentre adscrito el practicante y, en caso de no haber preferencias, del espacio del que se disponga.

Sabiendo la orientación adecuada (con la ayuda de una brújula es muy fácil), tendremos que buscar una mesa acorde a las dimensiones del espacio disponible y colocarla de la forma que sea más cómoda para nosotros de acuerdo con estos principios.

Elementos que componen el altar

Para entender cómo y qué elementos básicos debemos usar en nuestro altar, debemos comprender cuál es la correspondencia entre los puntos cardinales y los elementos. La que a mí me han enseñado es ésta:

Este – Aire

Sur – Fuego

Oeste – Agua

Norte – Tierra

Estas correspondencias pueden variar de tradición a tradición, pero lo que está claro es que los representantes de los elementos deben corresponder más o menos con su punto cardinal. Normalmente, los elementos se suelen representar en el altar de la siguiente forma:

Aire – Incienso

Fuego – Vela

Agua – Agua

Tierra – Sal

Es también importante incluir representaciones de la Diosa y el Dios. ¿Dónde poner estas representaciones? Normalmente se dice que el lado derecho del altar corresponde con el Dios, y el izquierdo, con la Diosa. Estas representaciones, a su vez, pueden ser velas que encendamos o bien estatuillas que decidamos poner encima de nuestro altar.

He hecho un pequeño esquema para que entendáis cómo sería un altar orientado al Norte. Nótese que la vela que representa al Fuego está al Sureste, porque nosotros estaríamos mirando el altar hacia el Norte, por tanto al encender esa vela que debería estar al Sur, si no tenemos cuidado nos podemos quemar. Ésta es una pequeña licencia que me permito, porque, al fin y al cabo, la vela sigue estando al Sur y yo como practicante estoy totalmente a salvo de quemaduras y otros accidentes.

Incluyo el pentáculo en el centro del altar, pese a ser una herramienta, porque, al contrario que la varita y el athame, no lo suelo llevar encima durante los rituales.

Teniendo más de un altar

Hay gente que prefiere tener más de un altar en su casa. Lo hacen así para diferenciar funciones o para dedicar altares a diferentes deidades. También hay familias en las que hay más de un pagano y cada uno de ellos quiere tener un espacio dedicado a su propia espiritualidad. Esto es bastante útil, especialmente cuando se tiene algún Dios o Diosa «patrón», con el que existe un vínculo muy fuerte, y al que queremos dedicar su propio altar.

En este tipo de asuntos, las preferencias personales también tienen mucha importancia, puesto que, al margen de las correspondencias de los elementos, somos nosotros como practicantes los que nos tenemos que sentir cómodos con ese espacio.

Mantenimiento del altar

El altar hay que mantenerlo, es decir, hay que tenerlo más o menos limpio y arreglado. Es un espacio que dice mucho de nosotros y nuestra práctica espiritual, así de cómo nos encontramos por dentro. Limpiar nuestro altar aprovechando la luna menguante puede ser muy terapéutico cuando queremos deshacernos de algo, por ejemplo un hábito.

También es una forma de «actualizarnos», es decir, de seguir los ciclos de la naturaleza dentro de nuestro espacio personal. Muchos wiccanos incluyen en su altar elementos de la naturaleza, flores del tiempo, u otro tipo de ofrendas de gran belleza que no sólo quedan muy estéticas, sino que también nos recuerdan al momento del ciclo anual en el que nos encontramos, lo que nos ayuda a estar «sintonizados» con la rueda del año.

4 thoughts on “Creando un altar: nociones básicas

  1. MUY INTERESANTE LO REFERENTA A ORIENTACION DE UN ALTAR YA QUE NO SIEMPRE SE TIENE UN ESPACIO EN EL LUGAR IDEAL. POR EJEMPLO YO SOLOS DISPONGO DE UN RINCON SITUADO AL NOR OESTE, ES DECIR YO FRENTE AL ALTAR MIRARIA AL OESTE ¿ NO SIRVE MUCHO VERDAD? GRACIAS DE TODAS MANERAS POR SU INFORMACIONION.

  2. Verdaderamente, práctico e interesante.

    Carlos Pastor: si solo tienes ese espacio disponible(a menos que uno sea rígido y estricto) pues ese espacio es el ideal, a lo mejor la misma energía te está pidiendo que manejes la energía del oeste, del agua, de los sentimientos. Creo que uno necesita adaptarse a sus circunstancias, espacios y tiempos de vida. Dejarse llevar por la energía divina.

    Saludos

  3. muchas gracias por la información, es necesaria, pero yo tenia entendido que cada elemento se localizaba a cada punta del pentagrama… (?)

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